De noche, metido en el agua y con mucho frío» es la descripción inicial que ofrece Rodolfo Yasmany Santos cuando habla de sus experiencias en la pesca de angula (alevín de anguila).
Añade que los animales, de apenas cinco centímetros de largo y 0,14 gramos, después de agruparse en sitios de las costas, remontan los ríos. «Hay que analizar la corriente para colocar «el miliciano», algo así como un embudo de malla fina, detrás del cual, en un palo encajado en la arena, coloco un candil encendido para que naden hacia la luz y queden atrapados».
La vigilia es permanente, continua, porque una crecida, como le sucedió una vez, puede arrastrar las artes de pesca. Frecuentemente, tras una agotadora jornada, atrapa un reducido puñado. El pasado año fue el mejor de los cuatro que lleva dedicado a la dura faena. En compañía de un hermano y un primo acumuló 48 kilogramos.
Sí, capturar angulas es difícil. Pero a la vez es una actividad necesaria para ingresar divisas al país. El cristalino alevín es uno de los rubros exportables con mercado seguro, explica el ingeniero mecánico naval Julio Mejías Pinto, director de la Empresa Pesquera Holguín. «En septiembre, inicio de la campaña, el kilogramo se comercializó a 2 700 dólares. Pero hasta el final de diciembre, cuando concluya la pesca, puede llegar progresivamente a los 6 000».
Por los resultados de 2019, la entidad, que adquiere las capturas mediante compras a los pescadores, por lo general integrados en familias, fue una de las más destacadas nacionalmente. Acumuló algo más de 800 kilogramos que aportaron al país más de cuatro millones de dólares de acuerdo con los precios fluctuantes.
Más atención a las operaciones logísticas
La pesca, amparada con la licencia correspondiente y un conjunto de regulaciones dirigidas a la protección de los recursos marítimos y acuícolas, se desarrolla casi en todos los ríos de la provincia de Holguín, y es, además de fuente de empleo y de beneficio para la alimentación doméstica, una práctica con posibilidades de aumentar las ganancias del país.
«El año pasado comenzamos a incentivar la captura en los ríos del este, es decir, los ubicados en la zona de pesca localizada entre Sagua de Tánamo, que es territorio holguinero, y Baracoa, en Guantánamo. La decisión tiene en cuenta un estudio del potencial del área».
Se han impuesto, remarca, perfeccionar las operaciones logísticas, sobre todo las relacionadas con la extracción de las angulas de los intrincados sitios de captura, lo que exige planificar a punta de lápiz el uso del transporte y la disponibilidad de las cajas donde las protegen.
Otro paso importante es terminar la remodelación total de la Sala de Recepción y Preparación para la Exportación, plantea Reimer Marrero Brito, técnico a cargo de esa instalación, ubicada en la granja Alevipez, en la zona de Beola, municipio de Rafael Freyre.
Cuando concluya la obra, el flujo productivo ganará en organización y el personal contará con mejores condiciones de trabajo. En sus espacios, tan pronto llegan las angulas en volúmenes de un kilogramo por caja, se despojan de la fauna acompañante. También comienzan a adaptarlas a vivir a una temperatura de diez a 12 grados para que se adormezcan y consuman menos oxígeno.
Entonces, inicia un periodo de atenciones que se prolonga hasta el momento de la venta al cliente extranjero: «Dos veces al día les cambiamos el oxígeno, el hielo y el agua, que es de un pozo libre de cualquier tipo de contaminación. Cuando tienes pocas cajas, no es problema, pero si acumulas unos centenares, como ocurrió en un momento de la campaña de 2015, «sudamos la gota gorda»».
Sobre el destino final de las angulas, asegura que el comprador tiene, a su vez, ansiosos clientes. En muchas partes de Europa y Asia constituyen un exótico y costoso manjar gastronómico. También se les destina a granjas de ceba que convierten cada kilogramo en una tonelada de anguilas.
Hacia esto último apunta un proyecto aprobado por el Ministerio del Comercio Exterior y la Inversión Extranjera. La Empresa Pesquera Holguín, aclara su director, lo incluyó en la correspondiente cartera de oportunidades, a la espera de que resulte atractivo a un inversionista extranjero. Como infraestructura disponible brinda parte de las instalaciones de la granja de ceba y reproducción de clarias, en Beola.
Tenca HG y otros rubros
Holguín exporta hacia el área caribeña la Tenca HG, una nomenclatura comercial internacional, que exige el empaque en cajas que contienen tronchos del mismo tamaño y peso. De la pesca y procesamiento se encarga el personal de la unidad empresarial de base Acuanipe, asentada en el municipio de Cueto.
El contrato firmado este año establece la entrega de 15 toneladas, cada una a 760 dólares, según información aportada por Caribex, entidad comercializadora cubana. La cifra a vender tiene que ver con la baja capacidad de congelación, debido a desperfectos técnicos de la cámara que realiza ese proceso.
Sin esa limitante podrían dedicar más cantidades a la exportación y arribar a unas 30 toneladas anuales. No sería difícil, porque hace tres años entregaron al comprador extranjero 24 toneladas.
Pero no se puede perder de vista que la ueb y la empresa provincial tienen en consideración que la comercialización con el exterior, por muy importante que sea, está aún en un periodo en el que no debe afectar el volumen de elaboración de productos, entre ellos hamburguesas y embutidos, que salen del centro industrial instalado en las cercanías de la presa Nipe, explica Julio Mejías.
Este reservorio y el de Birán constituyen el escenario principal de la pesca de la selecta tenca a exportar. En ambas, los pescadores hacen proezas para mantener las artes de pesca, sobre todo redes, cuya adquisición también es entorpecida por las trabas del bloqueo de Estados Unidos. En la presa de Nipe, si se contara con redes capaces de alcanzar mayor profundidad, las capturas en general serían mayores.
Así aumentaría la extracción y preparación de las vejigas natatorias de la tenca, producto que Acuanipe ha exportado en los últimos tres años. En el presente han logrado vender cerca de 400 kilogramos con destino a la región asiática, donde se le consume generalmente en sopas, además de tener uso en la elaboración de cosméticos, comentó Moraima Hernández Velázquez, directora de Producción e Industria de la Empresa Pesquera Holguín.
Sobre la posibilidad de sumar a la exportación la jaiba, asevera que se hará la prospección de la zona de pesca de la bahía de Nipe, donde abunda la especie.
«En el presente año el plan nuestro es de 43 toneladas para consumo en la gastronomía de la provincia. Si los estudios a realizar aconsejan incrementar los niveles de captura para dedicar una parte al comercio con el exterior, debemos encarar varios problemas, entre ellos la transportación hasta el centro industrial de Acuanipe y la congelación de las jaibas, que se exportan en ese estado».
La pesca estatal a mayor escala de la actual no debe afectar las poblaciones del crustáceo, que también sufren la fuerte presión de los pescadores residentes en los asentamientos ubicados en las márgenes de la bahía.
Ley de Pesca
Tiene como objeto establecer las regulaciones para el adecuado ordenamiento, administración y control de la pesca, en función de la conservación y el aprovechamiento racional de los recursos hidrobiológicos en las aguas marítimas, fluviales y lacustres de la República de Cuba, con el fin de contribuir a la soberanía alimentaria de la nación.
Los recursos hidrobiológicos, los componentes de la diversidad biológica y la información genética de estos que se encuentran permanente u ocasionalmente en el territorio de la República de Cuba y en las áreas bajo su soberanía, forman parte de su patrimonio y corresponde al Estado cubano establecer las condiciones para su protección, conservación, uso y aprovechamiento racional.
De acuerdo con su finalidad, la pesca comprende las modalidades siguientes: comercial, deportiva, recreativa y de investigación.
Las zonas de pesca se determinan por el Consejo de Ministros, atendiendo al valor y la abundancia de los recursos hidrobiológicos existentes. La ordenación y manejo de los recursos pesqueros en estas zonas corresponde al Ministro de la Industria Alimentaria.
Tomado de Cubadebate